El Arrepentimiento Abre Puertas...

“Dios le dio todo lo que pidió” 

(2CRO 1: 11 y 12)

  

El arrepentimiento abre las puertas delante de Dios. Salomón le pidió a Dios sabiduría, que significa usar la inteligencia para lo bueno, saber hablar y saber callar, colocar a Dios en el primer lugar de nuestra vida. Dios le dio sabiduría en abundancia.  Pero también Dios le dio a Salomón ciencia en abundancia, que significa inteligencia al máximo, conocimiento que Dios da y que no llega a nosotros a través de estudios sino directamente de Dios, significa también tener claridad en aquello que yo hago. Dios le dio ciencia a Salomón en abundancia. Pero también le dio lo que él no pidió y se lo dio en abundancia.

Dios le dio todo lo que pidió. La clave es tener una vida limpia delante de Dios, no una vida de engaño. Es apartarse del pecado, de la mentira, del rencor, del odio; para así esperar en abundancia lo que le pidamos al Señor, y aún aquello que no le hemos pedido, Dios nos lo dará en abundancia. Si vivimos para Dios, como Salomón, Él puede también hacer lo mismo con nosotros. ¡Para la Honra y la Gloria Suyas! ¡Amén!

2Cr 1:11  Y dijo Dios a Salomón: Por cuanto hubo esto en tu corazón, y no pediste riquezas, bienes o gloria, ni la vida de los que te quieren mal, ni pediste muchos días, sino que has pedido para ti sabiduría y ciencia para gobernar a mi pueblo, sobre el cual te he puesto por rey,

2Cr 1:12  sabiduría y ciencia te son dadas; y también te daré riquezas, bienes y gloria, como nunca tuvieron los reyes que han sido antes de ti, ni tendrán los que vengan después de ti. 

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