“En este mundo brillan todavía estrellas en las noches
oscuras las cuales avecinan la venida de un mejor mañana”
“Ejemplo de integridad” (1 CRO 4: 6-10)
En
el pasaje son nombradas muchas personas poco importantes que nada
hicieron, excepto Jabés; quien venía de un hogar sin linaje y fue mayor
que sus hermanos. Su madre padeció y tuvo mucho dolor de parto, de ahí
su nombre: Jabés (dolor).
Jabés
no tiene estirpe, ni herencia pero oró con inteligencia a Dios
pidiéndole su bendición y no sólo bienes materiales. Esto agradó a Dios y
le concedió sus peticiones.
Dios
nos da un proposito y nos reta a ser distintos, a ser excelentes; a ser personas de
integridad e inteligencia. Si nuestros padres fueron buenos, procuremos
ser excelentes y leales a Dios; que le pidamos con vivacidad su
bendición para tener excelencia en el estudio, en nuestra familia, en
bienes, en salud, en proyectos.
Vivir
con integridad para que la Gloria de Dios se manifieste y refleje en
nuestras vidas y seamos ejemplos vivos de Dios. Ser fieles; porque si en
lo poco somos fieles a Dios, en lo mucho Él nos pondrá (1 COR 4: 2).
Que
renueve nuestros corazones y no se nos dañe al recibir sus bendiciones.
¡Para la Gloria y la Honra de su Santo Nombre! ¡Amén!
1Cr 4:6 Y Naara dio a luz a Ahuzam, Hefer, Temeni y Ahastari. Estos fueron los hijos de Naara.
1Cr 4:7 Los hijos de Hela: Zeret, Jezoar y Etnán.
1Cr 4:8 Cos engendró a Anub, a Zobeba, y la familia de Aharhel hijo de Harum.
1Cr 4:9 Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes, diciendo: Por cuanto lo di a luz en dolor.
1Cr 4:10 E
invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: !!Oh, si me dieras bendición,
y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me
libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que pidió.
1Co 4:2 Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel.
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