jueves

No Te Apoyes En La Gente...

      
"No te apoyes en la gente porque te pueden fallar, apoyate en Dios que te da la vida" 

apoyate en Dios


  “Salomón y la grieta de la amistad” (1rey 12:2-4)

En los últimos años de su vida como rey, Salomón comenzó a aplicar yugo sobre el pueblo, una dureza con la gente que estaba en el gobierno, un exceso de rigidez y de maltrato verbal, abuso, dolor y a poner cargas pesadas; eso comenzó a hacer cuando estaba terminando su gobierno. Salomón no fue adorador, ni amó la palabra, ni la guardó, ni supo manejar la amistad con el pueblo de Dios. Sin embargo, fue amigo de las naciones vecinas, pero duro con los de adentro, porque se excedió en abusos y trajo angustia. Y viendo Dios su conducta, lo hizo desmoronar y caer por esa grieta de la amistad para con su pueblo Israel.

También encuentra uno personas muy amigas muy comprensibles con los de afuera; pero en la casa, muy sarcástica, que humillan. Cuidemos nuestro corazón; entre más Dios nos bendiga, más amigos seamos de nuestros cónyuges, de nuestros hijos, de nuestras ovejas si somos líderes. Y de los que estén bajo nuestra cobertura, recordemos que somos amigos de ellas y no dueños; que cuando tengamos que llamarles la atención, no humillemos, ni maltratemos, ni los maldigamos. Porque esa grieta de la amistad nos llevará al fracaso y no nos ira bien.

Pidámosle a Dios que nos ayude a enderezarnos para que los últimos días de nuestra vida se corrijan y Dios nos bendiga permanentemente. Porque la vida cristiana es de Gloria en Gloria, de bendición en bendición. Pero por más alto que Dios nos ponga, no perdamos la sencillez y manejemos la amistad en un marco sano con la ayuda de nuestro Dios. ¡Para Honra y Gloria Suyas! ¡Amén!


1Re 12:2  Y aconteció que cuando lo oyó Jeroboam hijo de Nabat, que aún estaba en Egipto, adonde había huido de delante del rey Salomón, y habitaba en Egipto,

1Re 12:3  enviaron a llamarle. Vino, pues, Jeroboam, y toda la congregación de Israel, y hablaron a Roboam, diciendo:

1Re 12:4  Tu padre agravó nuestro yugo, mas ahora disminuye tú algo de la dura servidumbre de tu padre, y del yugo pesado que puso sobre nosotros, y te serviremos.

Adios, no olvides dar me gusta al inicio gracias!

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