Debemos Luchar Por Nuestra Bendicion

“Podemos dedicar nuestros días a trabajar y relacionarnos con diferentes personas, pero al final del día no hay nada mejor que llegar a casa y reunirnos con los nuestros, con nuestra familia, y recibir el descanso esperado todo el día”

 

“Pelea por tu bendición” (GEN 32: 24-28)

La trascendencia es muy poderosa. Aquí en el pasaje bíblico, Jacob ha estado enredado en mentiras y engaños; su suegro lo ha engañado y han pasado 20 años donde los cielos han estado cerrados para él. Pero Dios estaba con Jacob y se va en busca de su hermano Esaú. Y estando de noche solo en el camino, vio un personaje celestial y lo agarró varias veces por varias partes, y Jacob no lo soltaba; hasta cuando empezaba el alba y al soltarle Jacob le dice que no lo dejará si no le bendice. Y aquel personaje no tuvo más que bendecirlo y le dijo no te llamarás más Jacob (engañador) sino Israel (príncipe) porque has luchado por tu bendición.

Debemos pelear por nuestra bendición: Sembremos en el terreno de Dios, levantémonos a orar en amor en las madrugadas y digámosle al Señor que no le dejaremos hasta que nos bendiga y entonces veremos la mano de Dios levantándose con poder, porque el Señor nunca nos dejara en vergüenza… ¡Para la Honra y la Gloria Suyas! ¡Amén!